martes, 15 de julio de 2014

Sólo Alaska. (Vainilla y humo 12)


Por lo general, no hay nada más agradable que regresar al lugar en el que has soportado tus mayores penurias.


Enero


Fue durante una noche de enero que él se encontró a si mismo sentado en un taburete en un bar de las afueras. Habían pasado muchos años desde la ultima vez que se había preguntado si ella era feliz. Habían pasado muchos años desde la ultima vez que había pensado en ella o escuchado ese maldito CD. Aunque, de vez en cuando, se encontraba con alguna cosa que le recordase a ella.

Él esperaba que ella hubiese encontrado lo que andaba buscando.

Eric Campbell estaba manteniendo una conversación a base de susurros con el barman mientras el viejo hombre le deslizaba otra cerveza sobre la barra. La música hacia vibrar el suelo cuando Eric tomó su primer sorbo.

"¿Vienes por aquí a menudo?"

Él se dio la vuelta, sorprendido por esa voz suave pero áspera que provenía del asiento de al lado.

Él se la quedó mirando por un segundo, asumiendo que ella estaba ahí frente suyo. La sorpresa era evidente en los rostros de ambos y él sabia que, si alguien fuese testigo de esa situación, simplemente asumiría que eran dos viejos amigos que se reunían por primera vez en mucho tiempo.

Una pequeña sonrisa tiró de la comisura de los labios de ella.

Nada en ella había cambiado, a excepción de sus ojos.

Les faltaba algo, algo perdido en ellos que él solo había conocido durante esos pocos meses que había pasado a su lado, bailando en un vacío apartamento o quedándose despiertos hasta tarde para ver los documentales.

Los secretos en sus gélidos ojos azules se habían ido, ido cómo lo había hecho ella en el momento en el que él se había dado cuenta que esa chica había cambiado su vida.

Le tomó un momento encontrar su voz. Hizo acopio de todo su autocontrol para no aferrarse a ella y rogarle que no le dejase otra vez. Todo lo que él quería hacer era mirarla con asombro. Esa frágil y destartalada rubia había crecido para transformarse en alguien fuerte, que ahora se encontraba enfrente suyo con una sonrisita en sus labios. Una que había echado sumamente de menos.

"¿Usas esa frase para ligar a menudo?" Él sonrió en respuesta, encontrando el déjà vu del momento muy reconfortante. Ella se echó a reír por su acertado comentario y, por favor, de que manera había echado de menos esa risa.

Su nombre era Alaska Decany.

No Alaska como el lugar o ni siquiera como el seudónimo de esa cantante de los ochenta.

No era la chica que había tratado de suicidarse o la chica que había cambiado la vida de Eric Campbell.

No, solo Alaska, como muy bien ella diría.

Pero para Eric Campbell, cuando fue alguna vez sólo Alaska?



- THE END? -















This is the end.
Hold your breath
and count to ten.


Annie.


Gracias. (Vainilla y humo 11)




Más que los besos, són las cartas aquellas que mueven a las almas.


Julio


Tu eras el ultimo en mi lista. El numero 15, para ser exactos: “Cambiar la vida de alguien.”

En realidad no puedo hablar por ti y decir que, de alguna forma, he marcado una diferencia en tu vida Eric, pero realmente espero haberlo hecho. Ya ves, en alguna parte del proceso de cambiar tu vida, tu acabaste cambiando la mía.

No estaba tratando de suicidarme aquella noche.

Habíamos discutido y sentí como si todos los calmantes del mundo no pudiesen liberarme de la sensación de que te había perdido pero supongo que ahora si lo he hecho, ¿eh?

Quise decir lo que dije aquella noche en tu cama. Espero que encuentres lo que andas buscando, porque eso no soy yo. No te conformes con Rihanna cuando puedes tener Mumford and Sons y cuando encuentres a la chica indicada, llevala a Grecia. Estoy segura de que le gustará y sé que a ti te encantaría ir. Porque te conozco, ¿recuerdas?

Si hay algo que me queda por decir, es gracias.

Tú de verdad cambiaste mi vida Eric Campbell, y me hiciste darme cuenta de que había una razón tras esa lista.

¿Qué motivo hay en ver todas esas cosas increíbles si no puedes esperar para ver más?

Me has salvado la vida y no creo que haya suficientes palabras en el diccionario para resumir mi gratitud. Solo que sepas que si vuelvo a encontrarte alguna vez de nuevo en el futuro, seré feliz. Quizás yo tendré una familia o tu la tendrás. O nos volveremos a ver en algún oscuro bar en algún lugar de este mundo. Quiero que sepas que te miraré y sonreiré y recordaré que si no hubiese sido por ti, yo no estaría allí.

Así que gracias, Eric Campbell.

Te veo por ahí.

Alaska.

P.D.: Yo también te amo.















You know,
sometimes the world seems
like a pretty mean place.


Annie.


domingo, 27 de abril de 2014

Oh! The places you'll go!




Congratulations! 

Today is your day. 

You’re off to Great Places! 

You’re off and away!


You have brains in your head.

You have feet in your shoes. 

You can steer yourself any direction you choose. 

You’re on your own. 

And you know what you know. 

And YOU are the guy who’ll decide where to go.


You’ll look up and down streets. 

Look ‘em over with care. 

About some you will say, 

“I don’t choose to go there.” 

With your head full of brains and your shoes full of feet, 

you’re too smart to go down any not-so-good street.


And you may not find any 

you’ll want to go down. 

In that case, of course, 

you’ll head straight out of town.


It’s opener there 

in the wide open air.


Out there things can happen 

and frequently do 

to people as brainy 

and footsy as you.


And when things start to happen,

don’t worry. Don’t stew. 

Just go right along. 

You’ll start happening too.


OH! THE PLACES YOU’LL GO!


You’ll be on your way up! 

You’ll be seeing great sights! 

You’ll  join the high fliers 

who soar to high heights.



You won’t lag behind, because you’ll have the speed.

You’ll pass  the whole gang and you’ll soon take the lead. 

Wherever you fly, you’ll be best of the best 

Wherever you go, you will top all the rest.


Except when you don’t

Because, sometimes, you won’t.


I’m sorry to say so 

 but, sadly, it’s true 

that Bang-ups 

and Hang-ups

can happen to you.


You can get all hung up 

in a prickle-ly perch. 

And your gang will fly on. 

You’ll be left in a Lurch.


You’ll come down from the Lurch 

with an unpleasant bump. 

And the chances are, then, 

that you’ll be in a Slump.


And when you’re in a Slump, 

you’re not in for much fun. 

Un-slumping yourself 

is not easily done.


You will come to a place where the streets are not marked. 

Some windows are lighted. But mostly they’re darked. 

A place you could sprain both your elbow and chin! 

Do you dare to stay out? Do you dare to go in?

How much can you lose? How much can you win?


and IF you go in, should you turn left or right...

or right-and-three-quarters? Or, maybe, not quite?

Or go around back and sneak in from behind?

Simple it’s not, I’m afraid you will find,

for a mind-maker-upper to make up his mind.


You can get so confused

that you’ll start in to race

down long wiggled roads at a break-necking pace

and grind on for miles across weirdish wild space,

headed, I fear, toward a most useless place.


The Waiting Place...


...for people just waiting.

Waiting for a train to go

or a bus to come, or a plane to go

or the mail to come or the rain to go

the phone to ring, or the snow to snow

or waiting around for a Yes or No

or waiting for their hair to grow.

Everyone is just waiting.


Waiting for the fish to bite

or waiting for wind to fly a kite

or waiting around for Friday night

or waiting, perhaps, for their Uncle Jake

or a pot to boil, or a Better Break

or a string of pearls, or a pair of pants

or a wig with curls, or Another Chance.

Everyone is just waiting.


NO!

That’s not for you!


Somehow you’ll escape

all that waiting and staying.

You’ll find the bright places

where the Boom Bands are playing.


With banner flip-flapping,

once more you’ll ride high!

Ready for anything under the sky.

Ready because you’re that kind of a guy!


Oh, the places you’ll go! There is fun to be done!

There are points to be scored. There are games to be won.

And the magical things you can do with that ball

will make you the winning-est winner of all.

Fame! You’ll be famous as famous can be,

with the whole wide world watching you win on TV.


Except when they don’t.

Because, sometimes, they won’t.


I’m afraid that some times

you’ll play lonely games too.

Games you can’t win

‘cause you’ll play against you.


All Alone!

Whether you like it or not,

Alone will be something

you’ll be quite a lot.


And when you’re alone, there’s a very good chance

you’ll meet things that scare you right out of your pants.

There are some, down the road between hither and yon,

that can scare you so much you won’t want to go on.


But on you will go

though the weather be foul.

On you will go

though your enemies prowl.

On you will go

though the Hakken-Kraks howl.

Onward up many

a frightening creek,

though your arms may get sore

and your sneakers may leak.


On and on you will hike.

And I know you’ll hike far

and face up to your problems

whatever they are.


You’ll get mixed up, of course,

as you already know.

You’ll get mixed up

with many strange birds as you go.

So be sure when you step.

Step with care and great tact

and remember that Life’s

a Great Balancing Act.

Just never forget to be dexterous and deft.

And never mix up your right foot with your left.


And will you succeed?

Yes! You will, indeed!

(98 and 3⁄4 percent guaranteed.)


KID, YOU’LL MOVE MOUNTAINS!


So.

be your name Buxbaum or Bixby or Bray

or Mordecai Ali Van Allen O’Shea,

you’re off to Great Places!

Today is your day!

Your mountain is waiting.

So... get on your way!



Oh! The places you'll go! - Dr. Seuss




It is easily overlooked
that what is called now vintage 
was once brand new.


Annie.